
Resulta que nos estamos quejando siempre de que si los "antis" tal, que si los "antis" cual y a la primera de cambio les empezamos a dar la razón para que sigan martilleando la fiesta.
Este fin de semana se celebró en Antequera la tradicional corrida goyesca con Morante, El Juli y El Cid y toros de Vegahermosa (5) y de Jandilla (1). Además transmitida por Canal Sur para que toda la gente pudiese ver la injusticia que se hizo con un toro, la primera en la frente.
Y es que resulta que cuando aquello tenia pinta de tarde de paquete de pipas, salta al ruedo el tercero de la tarde, de nombre ATREVIDO, y le da por embestir como buen toro bravo que lo pario su bendita madre. Antes, Manuel Jesús Ruiz Román (hermano de Espartaco y picador del Cid) le había encasquetao un puyazo de muy señor mio con el toro empujando como debe empujar un toro bravo. Y cuando el buenatón del Cid de "jarto" (con jota) con Atrevido, algún sector del público (no todo el que debía) pedía el indulto, no se le ocurre a este torero otra cosa, en vez de calentar el tendido, que montar la espada y entrar a matar......penoso.
Si por algo me gustan los toros es porque cuando un animal demuestra que es bravo, el primero que tiene que hacer por salvarle la vida es el torero. A el Cid no se le ocurre otra cosa que decir que Atrevido fue "bueno" pero que no hubiese servido para padrear ¿...?. Perdone usted don Manuel Jesús, esto lo tendría que decir el ganadero que lo crió, usted como buen torero se tenia que haber limitado a intentar salvar la vida a un animal que le dio hasta la ultima embestida para que usted sacara pecho con su triunfo, pero también el de Atrevido.
Por eso hoy quisiera recordar a un toro bravo: Atrevido hijo de Atrevida, de Vegahermosa, un toro bravo que mereció como mínimo volver a la dehesa que para eso fue para lo que nacio y para lo que fue criado.